La subasta de la ex planta de Guilford, ubicada en el kilómetro 8 de Comodoro Rivadavia, se concretó a finales del año pasado y permitió pagar algunas indemnizaciones adeudadas a los trabajadores despedidos.

Jorge Echelini, uno de los abogados que siguió el caso y representó a trabajadores, afirmó que quedó una “sensación ambivalente” tras el remate. “Por un lado se concretó la venta del bien más grande, más valioso, que logró que la mayoría de los juicios se pudieran satisfacer. Por el otro lado, no se logró el objetivo que uno buscaba, que era un valor en venta mayor, con lo que poder responder a los trabajadores con la indemnización un poco más altas”, explicó en diálogo con ADNSUR.

Según detallo, el valor final de venta del predio de tres hectáreas fue de 550 millones de pesos, lejos del valor los 1.000 millones que se habían estipulado al momento de la tasación. 

Subastaron la última planta de Guildford y hay avances con los pagos de las indemnizaciones a los ex empleados

“Cuando salís al mercado a ofrecerlo y a venderlo, no encontrás compradores o interesados en eso. Fue una subasta muy ardua. Arriba de los 300 millones de pesos, las distintas confrontaciones fueron de a 10 millones de pesos”, explicó el letrado.

La planta fue adquirida por el Grupo Aldana, que pondría en el lugar un corralón de materiales, aunque Echelini afirmó que por el tamaño que tiene, con tres naves, puede tener fines múltiples. “Esta planta fue ofrecida a medio mundo. Desde grandes empresas de supermercadistas hasta empresarios fuertes de la ciudad. Todos fueron, la vieron, mostramos la planta un montón de veces, pero la verdad que al día de la subasta no aparecía ninguna oferta”, remarcó el abogado.

EL CIERRE DE UNA EMPRESA EMBLEMÁTICA

La planta textil Guilford Argentina pasó de confeccionar la tela para la camiseta de la Selección a cerrar sus puertas en 2016, dejando a más de 287 personas sin empleo.

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En sus años de oro la empresa tenía dos plantas de producción, unos dos mil operarios y una producción estimada en más de 500 toneladas de telas por mes. Guilford producía lycra, algodón, poliéster; telas que se enviaban a Buenos Aires donde se confeccionaba ropa deportiva, trajes de baño y ropa urbana que luego se comercializaba en el mercado interno y externo.

Todo ese pasado glorioso quedó muy lejos. Ahora, con el dinero de la subasta, se pagaron los juicios de los trabajadores que quedaron sin empleo. “Se empezó por los juicios donde tenían anotados los embargos, que son anotaciones históricas, porque se hacen al valor que tenés al momento en que terminás y aprobás una liquidación. La mayoría de los valores estaban entre 2020 y 2021 planteados. Se pagaron así como 14 o 15 juicios”, detalló.

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Previamente, desde la primera venta de máquinas, hace ya tres años atrás, se había constituido un fondo común de reparto con todos los trabajadores despedidos que se alimentaba cada vez que se cobraba un juicio. Con esta subasta, ese fondo volvió a recibir dinero. “De los que representamos nosotros, que son unos 130, cobraron todos”, aseguró.