El ministro de cultura Wolfram Weimer veta asteriscos, símbolos y desdoblamientos de género en documentos oficiales y pide extender la medida a ministerios, medios y escuelas, pese a la oposición de partidos y activistas
La cultura oficial alemana dejará a partir de ahora de utilizar asteriscos, plurales desglosados y todo tipo de símbolos como”@” para fijar la neutralidad de género en los documentos internos, comunicaciones y discursos hablados.
Así lo ha decretado el ministro de Estado de Cultura, Wolfram Weimer, que ha prohibido el lenguaje neutral en todos los departamentos bajo su jurisdicción, que reúnen a unos 470 empleados. También ha pedido que hagan lo mismo a los 15 ministerios federales, fundaciones, medios de comunicación públicos, al sistema educativo y a las instituciones culturales como museos o centros de interpretación histórica, que cuentan con capacidad de decisión al respecto y de momento no parecen muy dispuestos a seguir mayoritariamente la consigna. Pero él está convencido de que es cuestión de tiempo.
Wolfram Weimer ya no tiene empleados y empleadas, sino empleados a secas, a los que insta a remitirse al alemán normativo por escrito y verbalmente, interna y externamente. “Las reglas del idioma alemán se aplican a partir de ahora al Comisionado de Cultura y Medios de Comunicación en la Cancillería”, ha anunciado personalmente, y ha subrayado que en la Cancillería alemana, sobre la que sí tiene jurisdicción, ya no hay género neutro en cartas, correos electrónicos y notas. “Saludamos a los destinatarios con el saludo ‘Estimados señoras y señores“, ha puesto como ejemplo, amparándose en las pautas del Consejo de Ortografía Alemana.
En privado, todos son libres de expresarse como quieran, continúa Weimer, para quien “el género forzado de ninguna manera refleja cómo habla la gran mayoría en nuestro país”. “Más bien, el lenguaje de género neutro profundiza la división de nuestra sociedad, cuando el lenguaje debe conectar, no separar… es un medio importante de comprensión social, no un campo de juego para los ideólogos. Es por eso que rechazo cualquier educación lingüística condescendiente”.
Weimer estudió Historia, Lengua y Literatura alemanas, además de Ciencias Políticas y Economía, con tan alto rendimiento que, en 1986, recibió una beca de la Universidad Americana en Washington, D.C. No pertenece a ningún partido político, pero ha destacado en proyectos editoriales. Desde 2015 era el editor de la revista The European, otro producto editorial en el que se prima la excelencia de la lengua, cuando el canciller Friedrich Merz lo reclutó como elemento independiente para la administración alemana de la Cultura.
Una de sus primeras decisiones, tras tomar posesión de su cargo, ha sido este llamamiento a “todas las instituciones financiadas con fondos públicos”. Le preocupa la preservación de “nuestra cultura lingüística en esta tierra de poetas y pensadores”. En su opinión, las intervenciones deliberadas a través del género, por lo tanto, son “no solo innecesarias, sino que dañan la belleza de nuestro lenguaje”.
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL – MUNDO
– Alemania da el primer paso para prohibir el lenguaje inclusivo
